miércoles, 30 de julio de 2008

Dicen que esperar...


Dicen por ahí que esperar es: necesario, importante, difícil, aburrido, imposible, injusto... hay muchas maneras de calificar la espera. También he escuchado que la vida es lo que sucede mientras estás ocupado planificándola. Me quisiera tomar la libertad de decir que la vida es lo que sucede mientras uno está esperando...

¿Qué uno espera? Depende de quién, a veces se espera por el doctor en una oficina, por la contestación de alguna solicitud, por ganarse la lotería, por el amor, una llamada, un correo electrónico, una señal. Cosas que creemos que cambiarían la realidad como la conocemos y nos impiden conformarnos con ella. No digo que debamos ser mediocres, porque se sabe que soy una inconforme de fábrica, pero ese gusanillo que no nos deja dormir en paz es el que a veces debemos desechar para que el día a día no sea tan ingrato. Esperamos lo inesperado, la vida es esperar lo sepamos o no; nos demos cuenta o no.

Esperamos llegar a fin de mes para pagar las cuentas a la misma vez que esperamos llegar a fin de mes. A veces pienso que la relación significado/significante no es tan arbitraria, aunque seguro que hay una explicación etimológica para esta coincidencia pero no lo quisiera desvirtuar. A la misma vez que esperamos impacientemente el paso del tiempo, esperamos con esperanza que nos sucedan cosas gratas. No significan lo mismo, suenan igual y son complementarias de una manera muy poética.

Para mí es imposible esperar. Ahora y poco a poco estoy sobrellevándolo mejor; lo más importante es que estoy aprendiendo a que no me afecte tanto. Siempre me tengo que recordar que se me va a pasar la vida por delante si sigo ofuscada en esperar. Lo que no puedo tener/conseguir/saber ahora llegará en su momento si tiene que llegar. Qué fácil es decirlo así en frío... pero no pasa un día que no me des-espere (otra fortuita coincidencia). Pero lo más difícil es decirle a alguien que no se preocupe, que espere, cuando sabes lo difícil que es. ¿Cómo le dices a tu hermano, que lo acaban de dejar, que tiene que seguir esperando, que se va a sentir mejor con el tiempo, pero que eso llega luego... que espere? ¿Cómo no te sientes horrible porque sabes que te lo han dicho y has querido matar a esa persona que, con buenas intenciones, te hace repasar todo a ver en qué fallaste una y otra vez?

Pues hay que aguantarse. Pero no hay que dejar que la vida se te pase de largo por estar esperando.

Una foto vale más que mil palabras...